Movimiento de Trabajadores y Campesinos: 2007

El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), con preocupación política sobre el futuro del régimen, anunció el martes 10 de abril su resolución de permitir recoger firmas para convocar al referéndum sobre el TLC diciendo que "…en la democracia hay mecanismos cuerdos y civilizados de resolver las diferencias, lejos de las bombas molotov y los pasamontañas...la última palabra la da el Tribunal donde siempre supimos que el referendo está hecho... para arbitrar decisiones... que amenazan la, paz social"1. Traducido, el TSE reconoce que las movilizaciones del pueblo costarricense contra el perverso Tratado de Libre Comercio con Bush han puesto contra las cuerdas no solo al gobierno sino al mismo régimen.
Es probable que todos estemos de acuerdo en que llevar a consulta popular el TLC se constituye en una derrota política para Arias, ya que el presidente siempre sostuvo que el único lugar en donde se resolvería el tratado sería en el congreso. Pero ya no. Ahora serán las urnas quienes indiquen su futuro.

Además de esa derrota política, el TSE le creó al gobierno otro problema, igual de grave, y es que abre el debate con carácter urgente en el sentido de si el TLC debe ser consultado o no a la Sala Constitucional antes del referéndum. Y aquí es donde con agilidad de púgil nuevo, Arias hizo un movimiento de cuerpo y trató de esquivar los dos golpes, y de paso lanza gancho al hígado, molesto porque Don José Miguel Corrales le robara el mandado.

El Presidente Arias y su equipo de gobierno ya habían, con anterioridad a la resolución del TSE, evaluado la situación del TLC luego de la marcha y los acontecimientos de Siquirres del 26 de febrero y del resultado de encuestas publicadas en La Nación en donde la percepción positiva del público sobre del TLC va como el cangrejo, para atrás. Según fuentes de todo crédito, para el viernes 20 de abril tenía preparada una encerrona de gobierno en la que le anunciarían al país la convocatoria al referéndum. Pero Arias tuvo que adelantar su nueva posición ante la sorpresiva decisión TSE, y, no solo aceptando la realización del referéndum, dice que el mismo Poder Ejecutivo lo convocará y que no será necesario que Corrales inicie la recolección de firmas.
Arias y los defensores del tratado, ahora lo estamos viendo con más claridad, le tienen pavor a ésta consulta. El Lic. Rubén Hernández sale en auxilio jurídico de los amigos del tratado y dice que la consulta no procede2.

Aún no sabemos si el referéndum será convocado tal y como lo estableció el TSE por medio de la recolección de firmas o como lo propone el gobierno por la vía de iniciativa conjunta. A partir del lunes 23 este aspecto irá aclarándose este crucial aspecto. Tampoco se ha determinado el porcentaje de participación de ciudadanos inscritos (30% o 40%) que se necesitaría para que el resultado del referéndum sea de acatamiento obligatorio.

Pero, y este el punto al que queríamos llegar, sobre su constitucionalidad, los opositores al TLC decimos no solamente que sí se puede hacer la consulta a la Sala Constitucional, sino que es condición necesaria para participar en el referéndum. En el amplísimo espectro del movimiento antiTLC ya conocemos que sectores se han pronunciado. En las organizaciones de base, los compañeros de la Coordinadora Regional contra el TLC de la Zona Norte fueron de los primeros en decir que para aceptar el referéndum debe realizarse la consulta ante la Sala Constitucional. En el congreso, el diputado José Merino ha manifestado que “de previo a una convocatoria a referéndum del TLC debe consultarse a la Sala Constitucional sobre los grandes roces de constitucionalidad que presenta este Tratado”3. En el movimiento sindical la central CGT anuncia que no hay que bajar la guardia y se debe continuar la lucha en las calles… “cuando el TLC es inconstitucional”4. En el ámbito universitario, Alberto Cortez interpreta que “…previo al referéndum debe hacerse la consulta sobre la constuticionalidad del tratado a la Sala IV. Si no se hace de previo, no habría cuando hacerlo y existe un mandato constitucional de que todo tratado internacional debe ser consultado antes de ser votado”5.

Es muy importante analizar con cuidado, y reproducir en el mayor ámbito posible, la opinión del abogado José María Villalta Estrada Flores, asesor legislativo. Villalta sostiene, entre otras cosas, que “nada impide, que en relación con el TLC y de previo a aprobar la convocatoria a referéndum se cumpla con el requisito de la consulta preceptiva de constitucionalidad. El Directorio Legislativo puede hacerlo, debe hacerlo aplicando lo dispuesto en los artículos 96 inciso a), 97 y 98 párrafo tercero de la Ley de la Jurisdicción Constitucional, normas que no son incompatibles ni con el espíritu de la consulta popular ni con lo dispuesto en la Ley de Regulación del Referéndum, y que más bien facilitarían la adecuada aplicación de este instrumento.
En conclusión. Es mentira que no se pueda consultar el TLC a la Sala Constitucional antes de someterlo a referéndum. Esta consulta es un requisito sustancial con amplio sustento constitucional para la incorporación de tratados internacionales (con rango superior a la Ley) a nuestro ordenamiento jurídico.

No solo es compatible con la consulta popular, sino que favorece su exitosa realización. Existen las normas legales que permiten resolver las lagunas existentes en la Ley 8492, para que la Asamblea Legislativa (u otros órganos legitimados) lleven a cabo la consulta de previo a la convocatoria a referéndum.
No deja de ser sorprendente la insistencia con que los promotores del TLC recurren a lecturas formalistas, rígidas e incompletas de la legislación nacional con tal de impedir que esta consulta se realice.

Todo indica que existe un gran temor a que la Sala Constitucional se pronuncie sobre aspectos medulares como la votación requerida por el TLC para ser aprobado, y que se pretende utilizar el instrumento del referéndum como una vía para evitar que dicho Tribunal se pronuncie sobre las serias inconstitucionalidades que tendría este Tratado”6.
De manera que visto el caso y comprobado el hecho, en este punto de la inconstitucionalidad del tratado de Bush al que, repetimos, los defensores del TLC ven con espanto de peste negra, nos queda aumentar la presión y las gestiones para que la consulta sea elevada a la mayor brevedad posible.

La consulta, junto con la convocatoria a un gran encuentro o asamblea democrática de todos los sectores anti-TLC, para decidir las medidas y estrategia para derrotar a la agenda de implementación y el TLC en el terreno que sea, siguen siendo las principales tareas del movimiento antiTLC.
EN LAS CALLES Y EN LAS URNAS, DIGAMOS NO AL TLC
Guàpiles, 19 abril de 2007
1 Luís Antonio Sobrado, Presidente Interino del TSE. Entrevistas, La Nación y Al Día, 14 abril 2007.
2 Supremacía constitucional. Rubén Hernández Valle. Página 15. La Nación. 18 abril 2007
3 Sin miedo al referéndum. Partido Frente Amplio. Comunicado de prensa. 14 de abril 2007.
4 Para que triunfe el “No Al TLC”, no hay que bajar la guardia y continuar la lucha en las calles. Boletín CTG. 19 abril 2007
5 La conquista democrática del referéndum y el futuro del TLC en Costa Rica. Alberto Cortez Ramos. Opinión Política ANEP. Abril 2007.
6 Sí es posible consultar el TLC a la sala constitucional antes de la convocatoria a referéndum. José María Villalta Floréz-Estrada

MOVIMIENTO DE TRABAJADORES Y CAMPESINOS (MTC).
POR UN NUEVO TIPO DE GOBIERNO Y HACIA UNA NUEVA SOCIEDAD.
UNA ORGANIZACIÓN EN PROCESO DE CONSTRUCCIÒN.

Con dolor comprobamos que la humanidad no avanza hacia senderos de progreso, dignidad y felicidad. El ser humano se ha convertido en un objeto al que matan con balas y bombardeos todos los días, al que asesinan de hambre, al que condenan a la ignorancia. El responsable de esto se llama capitalismo, el sistema económico que pone en manos de unos pocos los medios de producción (fábricas, grandes fincas agroexportadoras de caña, banano, piña, etc.) y de cambio (el sistema financiero). La riqueza que genera la humanidad todos los días la acapara apenas cerca del 3% de la población. El otro 97% vive en la incertidumbre, la pobreza y la miseria. Países como el nuestro, Costa Rica, poco a poco va perdiendo sus conquistas sociales porque los gobiernos de los millonarios ya ni siquiera soportan que el Estado ayude a la población más pobre a tener una casita propia o a comprar los alimentos más baratos. Antes, con el Estado Benefactor, los ricos en el poder (y muchas veces gracias a la movilización y lucha popular) otorgaron beneficios como el seguro social universal, las garantías laborales, el acceso al crédito barato y la educación, los riesgos del trabajo, el acceso a la educación. Todo eso y más se está perdiendo. Problemas como el terrible y doloroso flagelo de la drogadicción, que golpea inmisericorde a miles de familias humildes, no existirían si nuestra juventud está alimentada, con estudio y trabajo bien pagado y garantizado, con acceso a la recreación y a la cultura. Pero nuestros jóvenes no encuentran trabajo, no pueden concluir sus estudios. No tienen donde divertirse sanamente. Los pobres somos cada vez más pobres y los ricos son cada vez más ricos.

Nosotros los pobres somos cada vez en número y los ricos son cada vez menos pero más ricos. Como dicen los que saben hablar bonito, se está ensanchando la brecha social.
¿Qué hacer?. ¿Cruzarnos de brazos y dejar que las cosas sigan su curso?. Jamás. Por nuestras venas corre sangre, no horchata, y nos indigna ver la miseria y la desesperanza. Hay que ayudar a cambiar este país, hay que ayudar a que la riqueza, en un país como el nuestro que posee apenas el 0.03 % del territorio mundial pero el 4% de la biodiversidad mundial, sirva para que sus habitantes vivan felices y alegres, creativos, solidarios.

¿Quiénes somos?. Con miles costos y a puro pulmón pero con mucha ilusión, hemos creado el Movimiento de Trabajadores y Campesinos (MTC), una organización del pueblo trabajador, revolucionaria. Nacimos en Guápiles y nos estamos extendiendo a cada una de las siete provincias del país. Surgimos de las entrañas de las fincas bananeras. Somos el legítimo pueblo trabajador, que junto con los jóvenes y campesinos del campo y la ciudad, hombres y mujeres, nos proponemos luchar por una sociedad socialista, por un gobierno de trabajadores y campesinos. Nuestra organización tiene principios políticos sólidos: la independencia de clase, el internacionalismo proletario, la solidaridad con los pueblos del mundo que luchan contra la opresión. Usamos como método de lucha la movilización permanente y la democracia obrera.

Luchamos por los derechos de los trabajadores públicos y privados, en defensa de sus condiciones laborales y por la preservación de las convenciones colectivas, por las comunidades que necesitan un mejoramiento en la salud, por los jóvenes que estudian, que buscan trabajo, por las mujeres que quieren superarse y desean lo mejor para sus hijos, por los campesinos que necesitan tierra o por aquellos que requieren de apoyo para la producción, por el derecho a la diversidad sexual, contra toda discriminación racial.

En fin, las personas que deseen, sueñan, anhelan y quieren luchar por un mundo mejor, tienen asegurado su lugar en nuestra organización. Bienvenidos.